En la memoria quedará aquel domingo 3 de mayo de 2015. Estadio Bicentenario Nelson Oyarzún Arenas y se sentenciaba el descenso, el primero, en la historia de Cobreloa, tras caer por tres tantos a dos ante Ñublense en Chillán.

Pese al triunfo de los Diablos Rojos, el cuadro chillanejo también decretó el perder la categoría, yéndose ambos a la división de plata de nuestro fútbol. De todos modos, este duelo se jugó mucho más allá de los 90′ minutos que duró la brega, si no que se comenzó a jugar días previos.

Todo por la denuncia de Ñublense contra Cobreloa por la situación irregular de Alejandro Hisis, quien se desempeñó como ayudante técnico de ambos clubes durante el calendario futbolístico en curso, que en primera instancia no tuvo el veredicto esperado, pero tras la apelación, sí dio sus frutos.

Un día antes del partido, se dio cuenta que la Segunda Sala del Tribunal de Disciplina (aunque dos jornadas antes ya se conoció de la resolución) acogió dicho recurso y Cobreloa perdió tres puntos en lo deportivo, lo que significaba su descenso. Había una esperanza, que era ganar en el Ñuble e ir al TAS, finalmente fue innecesario.

El mensaje del Fantasma Figueroa

Era un duelo candente y como los zorros del desierto estaban molestos con sus pares chillanejos, ya con ambos equipos en la cancha, vino el primer indicio, los loínos no saludaron a sus compañeros de profesión y solo al árbitro Roberto Tobar y a sus asistentes.

Pero se sabía que sería un partido bravo, de dientes afilados y donde que terminasen los 22 jugadores, era casi imposible. Si ya a los 2′ minutos el defensor naranja Martín Zbrun se ganó amarilla por una fuerte infracción contra Benjamín Ruiz que con VAR, era tarjeta roja segura.

A los 6′ minutos, el paraguayo Gustavo Cristaldo abrió la cuenta para la visita quien celebró a lo Topo Gigio a modo de burla de los hinchas rojos. Pero como no hay peor astilla que la del mismo palo, Jonathan Cisterna puso el uno a uno en los 31′.

Pero a los 33′, todo cambió tras la expulsión de Miguel Sanhueza en los naranjas por una fuerte entrada contra Boris Sagredo. Manotazos y ánimos encendidos que se traspasaron a la orilla de la cancha.

Y fue Marco Antonio Figueroa quien fue expulsado por ingresar a la cancha, pero lo mejor fue cuando abandonaba el terreno de juego. Primero, miró hacia la tribuna y al leer sus labios dijo apuntando con el dedo “Fuiste, vo’, fuiste vo’, conch…”.

Luego, cuando ya estaba apunto de ingresar rumbo a la puerta que lo llevase al vestuario, el Fantasma toma un micrófono ambiental que estaba al borde de la cancha y le habla al máximo dueño de los rojos diciendo “Kiblisky, eres una rata, huevón. Eres una…”, y el CDF de aquel entonces, cortó la señal del micrófono.

El marcador por tres a dos en favor de Ñublense fue solo una anécdota, ya que ambos sentenciaron su descenso, pero para la historia quedará aquel compromiso.

Ñublense – Cobreloa: Nueve años después

Si bien ya se han enfrentado por el torneo de ascenso, este fin de semana se volverán a ver las caras por Primera División desde aquella jornada antes descrita. Momentos diferentes, pero con el morbo de aquel 3 de mayo.

El compromiso se jugará este sábado 27 de abril de 2024 a las 17:30 horas en el Estadio Nelson Oyarzún Arenas.